La última residencia de la exalcaldesa de Antofagasta, Karen Rojo, antes de ser detenida, era un Centro de Acogida de Solicitantes de Asilo, en la villa Ter-Apel, ubicada en un provincia de Groninga a 200 kilómetros de Ámsterdam. Según publicó La Tercera, la exautoridad condenada a cinco años y un día de cárcel efectiva por fraude al fisco, está en pleno proceso para solicitar asilo político ya que se autodenomina como “presa politica” y asegura que en Chile no tuvo un proceso justo y que su condena fue totalmente desproporcionada a los hechos que se le atribuyeron. Este medio también informó que antes de su detención, Rojo llevaba un vida tranquila y hace algunas semanas habría realizado un viaje a un lago con otros migrantes de América Latina. “Se le veía calma y alegre, aunque siempre preocupada por lo que pueda pasar en Chile con su familia”, comentó a La Tercera, una de las personas que ha estado en contacto con ella en estos últimos meses.